Saluda del Arzobispo de León – 2023

Luis Ángel de las Heras Berzal

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Semana Santa sinodal

También lo fue la pasada. Pero este año quiero invitaros a dar este calificativo a la Semana Santa de León siguiendo el mensaje del papa Francisco para la Cuaresma, que ha titulado “Ascesis cuaresmal, un camino sinodal”. En él nos invita a reconocer este tiempo fuerte con todas las exigencias que comporta subir a un monte elevado, retirarse a un lugar apartado, con la imagen del Tabor y la Transfiguración del Señor ante sus apóstoles Pedro, Santiago y Juan. Ellos se dejan conducir por Jesús lejos de las mediocridades y las vanidades. Lo cual exige esfuerzo, sacrificio y concentración, como ocurre en el camino sinodal que realizamos ahora, nos dice el Papa.

Las coincidencias entre el camino cuaresmal y el sinodal se dan igualmente entre la Semana Santa y este proceso eclesial en el que buscamos juntos una transformación como pueblo de la Pascua y del camino. Al final nos espera la gloria del Señor, aquella gloria que contemplan anticipadamente Pedro, Santiago y Juan. La belleza de esta visión compensa con creces las fatigas del camino. El final de una estación de penitencia, que realizáis con “esfuerzo, sacrificio y concentración”, es una buena imagen de la gloria del Dios vivo que estamos llamados a encontrar en nuestra peregrinación.

Recorremos el camino juntos los bautizados, con el objetivo de vivir “una transfiguración personal y eclesial” hacia el encuentro con el Resucitado y su Reino. La Semana Santa de León es un camino propicio para marchar sinodalmente los papones y lograr la transfiguración personal al tiempo que la eclesial. En el cartel anunciador de la Semana Santa de este año podemos intuir el itinerario de cambio personal en el papón principal, que es convocado, junto a todos los demás, ante la fachada de la Pulchra Leonina, para llevar a cabo la transformación eclesial con el resto de los diocesanos.

Sois hermanos, συνοδοί (compañeros) de camino, más allá del nombre de cada cofradía o hermandad, de sus titulares y los estandartes que os enorgullecen a cada uno. Con la mayor estima a cada penitencial, os invito a evitar cualquier asomo de rivalidad, así como actitudes alejadas del amor fraterno. Dejaos llevar por el Señor Jesús al monte de la transfiguración lejos de “vanidades y mediocridades”.

Que la Semana Santa de León, fruto del esfuerzo, sacrificio y concentración de cada papón, con la inestimable ayuda institucional, resplandezca bajo el signo de la sinodalidad. Ningún hermano ni hermana se ha de sentir caminante solitario, aislado ni marginado, ni ha de caer en la mediocridad ni en la vanidad. Confío en que todos, con actitud de penitencia, percibáis el impulso del Espíritu Santo, del mismo modo que experimentáis cómo cada imagen os eleva en volandas cuando procesionáis.

Que durante la Semana Santa profundicéis en los misterios que lleváis tan dignamente como braceros —hasta parecer que las tallas caminan y tienen vida—, de tal modo que acojáis el don de la esperanza y el amor infinitos que Dios nos entrega en la Cruz de Jesús para vivir como pueblo-sínodo de la Pascua y del camino.

Porque caminamos juntos, os deseo una fructífera Semana Santa sinodal.

 

Luis Ángel de las Heras Berzal, cmf

Obispo de León