La cooperativa salmantina, Dehesa Grande, es consciente de que su carrera hacia la internacionalización está en pleno auge gracias a la implementación desde hace años de su departamento de exportación, responsable de analizar la situación del vacuno de carne en todo el mundo.

Esta carrera se ha traducido ya en una evidencia. En los últimos años, Dehesa Grande se ha posicionado como un grupo cárnico referente en toda la península y en muchos mercados internacionales de Europa. Así el gerente de la cooperativa, Octavio Gonzalo, asegura que es uno de los objetivos prioritarios para este 2002 pues “todas nuestras inversiones están orientadas a un crecimiento nacional e internacional”.

En concreto a lo largo de estos años se han llevado a cabo las ampliaciones y mejora de las instalaciones con un diseño que está mejorando todo su proceso productivo para cumplir las normas de bienestar animal, maximizar el espacio y minimizar los consumos energéticos de agua y luz a través de energías renovables y donde también se controlan los residuos. “Crecemos siempre de manera controlada y responsable, respetando nuestro valor añadido que es nuestro proceso productivo”, argumenta el gerente.

Integrando la cadena de valor

Su sistema de producción integra- do le permite controlar todo el proceso. Desde que los animales están en el campo –con el asesoramiento técnico de la formulación de piensos de sus socios ganaderos, la mejora genética o la certificación de las explotaciones- hasta que el producto llega al consumidor a través de grandes empresas de distribución, comercio minorista, de sus propias carnicerías franquiciadas “Carnicerías Dehesa Grande” y de su tienda online www.dehesagrande.com

“En definitiva, la cooperativa busca la mejora de la calidad de la carne, de los indicadores medioambientales y de bienestar animal y la reducción del consumo de medicamentos” comenta Gonzalo, quién señala que el producto cumple con los máximos controles de calidad y bienestar animal. “Nuestra industria cárnica, el centro tipificación de terneros pasteros y nuestra granja, así como muchas de las granjas de nuestros socios cumplen con los estándares de calidad Welfare Quality” subraya Octavio Gonzalo.

Y es que la carne de Dehesa Grande es motor de la sostenibilidad y la dinamización de la zona Oeste de Salamanca. La cooperativa da empleo directo e indirecto a más de 70 trabajadores, “lo que supone un compromiso de dinamización, desarrollo e innovación de nuestro mundo rural. Estamos orgullosos porque mantenemos una parte de la economía en la zona, generamos empleo, aportamos mejores precios y proporcionamos una mayor seguridad y estabilidad para los ganaderos, que son nuestros socios” asegura Gonzalo.

Este crecimiento en 2021 se ha traducido en un incremento de un 16 por ciento en su facturación. En total, la facturación global del grupo cooperativo ha ascendido a más de 43 millones de euros, lo que representa cinco millones más respecto a 2020.